Hay que preparar a los jóvenes para la edad adulta, para que estén preparados para usar sus genitales de forma adecuada y segura. La señora les muestra la técnica del coito, les enseña a chupar y tragar y les demuestra con ejemplos personales cómo conseguir un orgasmo. A los jóvenes les gusta mucho la lección: absorben todos los conocimientos con verdadero interés. La mujer adulta parece bastante satisfecha con el resultado. No me cabe duda de que repetirán la lección por su cuenta.
Para una señora madura, el mero hecho de que le den en la boca y se corran en el mismo sitio es como un bálsamo para su cuerpo. Siente que no ha perdido su atractivo y compite con sus amigas más jóvenes en igualdad de condiciones. Y la atención de los machos le hace muchas cosquillas en la vagina.
Mi hijo siempre miraba a su madre con lujuria. Y aquí está la oportunidad de aprovecharse de ella. Cualquiera querría estar en su lugar.